En el ITAM de México están trabajando para quitarle al aibo su cerebro y ponerle uno más parecido a de las ratas.
Pretenden resolver el problema de SLAM (el problema simultáneo de saber dónde está un robot y generar un mapa) usando métodos similares a los de las ratas. Para ello están trabajando con científicos neurológicos para crear un cerebro que consiga salir de laberintos de forma parecida a cómo lo hacen las ratas. Alfredo Weitzenfeld, creador del proyecto, espera que haya robots inspirados en estas técnicas.
La innovación no está en usar métodos inspirados por ratas, sino en resolver los problemas de la misma forma en que lo hacen las ratas.
Via engadget.